Uno de los mayores problemas de salud pública en la actualidad es el desarrollo de afecciones generadas por el consumo de alimentos contaminados con microorganismos (bacterias, parásitos, virus y helmintos). Este tipo de intoxicaciones reciben el nombre de “enfermedades de transmisión alimentaria”.
La carne semi cocida, constituye uno de los principales detonantes para el desarrollo de este tipo de enfermedades. Las colonias bacterianas asociadas con mayor frecuencia a este tipo de alimentos son especies de Salmonella y Escherichia coli. Por su parte, dos de las varias comunidades parasitarias que generan enfermedad son el Toxoplasma gondii y la Taenia.
Si bien es cierto que procuramos adquirir estos productos en centros que cumplan las normas sanitarias, resulta imposible controlar el medio y los procesos higiénicos con los que la carne es obtenida. Por lo tanto, es necesario atacar a estos microorganismos con la cocción, la cual constituye su mayor debilidad.
La Salmonella es una bacteria cuya presencia se asocia generalmente al consumo de pollo semi cocido. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) estiman que la Salmonella conlleva el riesgo de presentar varios síntomas en los que destacan la diarrea, fiebre y dolores estomacales e incluso, en los casos más graves, puede generar inflamación intestinal.
Por su parte, la Escherichia coli es una bacteria que, si bien habita en el organismo humano sin producir enfermedad, presenta una variante denominada E. coli enterohemorrágica, la cual está altamente relacionada al consumo de carnes poco cocidas. Esta bacteria genera colitis hemorrágica, cólicos, falla renal, entre otros síntomas que pueden llevar a la muerte del individuo infectado.
En relación a los parásitos, el Toxoplasma gondii es un microorganismo que se desarrolla principalmente en los gatos y es expulsado de estos a través de sus heces, las mismas que entran en contacto con otros animales que, al ser consumidos por el ser humano, transmiten una infección conocida como toxoplasmosis. Esta infección en el embarazo puede generar abortos espontáneos o malformaciones en el feto.
La Taenia es un parásito que puede ser adquirido al consumir sus formas larvarias presentes en carne de ganado vacuno o de cerdo, lo que desencadena enfermedades tan graves como una invasión cerebral.
Para concluir, las enfermedades de transmisión alimentaria son generadas por el consumo de alimentos contaminados con especies bacterianas o por comunidades parasitarias y que pueden ser evitadas al lavar y cocinar adecuadamente los alimentos.